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El certamen, organizado por Construyo mi Futuro de la Cámara Chilena de la Construcción y el CILED-UDD reconoció a equipos de docentes y alumnos por sus aportes para la industria de la construcción. 

“Recibir el reconocimiento nacional del concurso Construye TP ha llenado de orgullo y alegría a toda nuestra comunidad educativa”, afirma Rubén Aravena, profesor de Construcción del Liceo Bicentenario Industrial Ingeniero Ricardo Fenner Ruedi, ubicado en la Unión, región de Los Ríos, quien lideró el equipo compuesto por cuatro estudiantes de tercero y cuarto medio que obtuvo el primer lugar del concurso Construye TP.

Para Rubén, el logro va más allá del premio: “es un reflejo del esfuerzo constante y del compromiso tanto técnico como humano que cultivamos día a día en nuestro liceo”, señala.

Reutilización de desechos

El proyecto ganador, llamado EcoAislant, surgió de la inquietud de los estudiantes por encontrar un nuevo uso para los desechos de la construcción. A partir de ellos, crearon un aislante térmico ecológico utilizando materiales reciclados como cartón, terciado, fibrocemento y trozos de madera. Estos elementos fueron procesados y combinados para ofrecer una alternativa eficiente, económica y sustentable.

El profesor explica que los alumnos aplicaron la metodología Design Thinking, lo que les permitió empatizar con el problema, investigar, idear, prototipar y, al final, presentar una propuesta sólida y viable. Rubén considera que, además de la mirada integral del proyecto, otro aspecto clave a destacar fue el trabajo en equipo fortalecido a través de la metodología del ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos): “Este enfoque ha permitido que nuestros estudiantes desarrollen su creatividad, autonomía y capacidad de innovar en el ámbito técnico, enfrentando desafíos reales con soluciones prácticas y sostenibles”.

Más allá del trofeo o el reconocimiento, el docente afirma que lo más valiosos fue: “observar a nuestros alumnos creer en sus propias capacidades, sentirse valorados y entender que su formación técnica tiene un impacto real en la sociedad. Esa es, sin duda, la mayor recompensa para todos nosotros”.

Una App con información clave

El segundo lugar, fue obtenido por el equipo de cuatro estudiantes de Construcción mención Edificación, de tercero medio, del Liceo Bicentenario de Excelencia Padre Oscar Moser de Padre Las Casas, región de La Araucanía liderado por el coordinador de la especialidad de Construcción mención Edificación, Marco Antonio Retamal.

Este reconocimiento es un “faro de inspiración” señala el coordinador porque desde un liceo técnico profesional de La Araucanía se están “generando soluciones de alto impacto para la industria”. En definitiva, “es una validación inmensa de nuestro proyecto educativo y un mensaje potente para todos nuestros alumnos: les demuestra que su formación es pertinente, que sus ideas son valiosas y que tienen la capacidad de competir y brillar al más alto nivel. Es un orgullo que une a profesores, estudiantes y apoderados".

El proyecto, llamado RCD Ecopress, ataca el problema de la gestión de residuos sólidos en la construcción, y para abordarlo los estudiantes diseñaron un prototipo de una aplicación móvil que centraliza información clave: entrega la ubicación georreferenciada de botaderos autorizados, un catastro de empresas que reciclan materiales y un resumen accesible de la normativa ambiental vigente. “Es una solución tecnológica para fomentar la sostenibilidad y la sostenibilidad en las obras".

Al igual que el equipo ganador, los estudiantes también utilizaron la metodología Design Thinking a la hora de elaborar el proyecto, la cual, como destaca Marco, desarrolla habilidades cruciales como el trabajo en equipo, el pensamiento crítico y la innovación.

La comunidad como foco

El tercer lugar lo obtuvo el proyecto VECIAPP, también de un equipo del Liceo Bicentenario de Excelencia Padre Oscar Moser, compuesto por cuatro estudiantes de tercero medio de la especialidad de Construcción mención Edificación, liderado por la profesora de Historia y Educación Ciudadana, Daniela Muñoz, quien señala que, si bien como colegio los tomó por sorpresa obtener el segundo y tercer lugar, los llenó de orgullo.

“No solamente coloca a los estudiantes en una super buena categorización, sino que también a la especialidad de Construcción mención Edificación y además, a nuestro establecimiento educacional en lo más alto. Hay mucho orgullo de parte de la comunidad educativa, de parte de los colegas, de parte de los estudiantes, de los compañeros de curso y del equipo directivo”, afirma Daniela.

El proyecto, consistió en una aplicación digital llamada VECIAPP la cual permite a las empresas constructoras comunicarse con los vecinos. “El problema que los estudiantes encontraron fue que las empresas constructoras generan una serie de conflictos sociales al momento de instaurar una construcción, por ejemplo, un supermercado o un proyecto inmobiliario, y las comunidades aledañas son las que sufren”, explica la docente.

Ante esta problemática, los estudiantes desarrollaron la aplicación que promueve el nombramiento de un “embajador vecinal” por parte de la constructora que les comunique a los vecinos, por ejemplo, los cortes de calles, de energía, entre otras cosas. Además, en la aplicación existe la opción de que la comunidad pueda participar en el proyecto.

Daniela concluye que su mayor aprendizaje al participar en el concurso fue comprobar que sí es posible lograrlo con estudio y perseverancia. Además, destaca la importancia de atreverse a participar y de superar bloqueos y temores.