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De la mano de la Fundación Irarrázaval y de la Universidad del Desarrollo, la Escuela Agrícola Las Garzas, en 2021, implementó un Plan Fomento Lector con el objetivo de enamorar a los niños con la lectura. Este año, los alumnos de 7º y 8º básico, leyeron en promedio 9 libros y los de primero medio 12 libros.

“Nos la jugamos para que nuestros alumnos sean buenos lectores, si se logra, mejoran en todas las asignaturas. Es clave leer y entender”, afirma Saturnino Borrego, profesor de Lenguaje de la Escuela Agrícola Las Garzas quien también es el encargado de desarrollar este Plan de Fomento Lector junto a los profesores Diego Muñoz y Nicolás Wulf.

En este establecimiento ubicado en Chimbarongo, el año 2022 se instaló el Plan y el desafío ahora es la consolidación y crecimiento. “Sabemos que es una inversión de tiempo y los resultados no son instantáneos, nuestro Plan Lector apunta al gusto por la lectura, leer es una necesidad no una imposición”, cuenta Saturnino.

La inversión para llevar a cabo el Plan Fomento Lector fue cercana a los 10 millones de pesos, financiados por la Fundación Irarrázaval, la Universidad del Desarrollo y la Escuela, con ello, se logró comprar más de 800 títulos.

Para generar el interés de los niños en leer se ideó un plan que involucra tanto a los profesores como a los padres. En el día a día se registra el avance de cada alumno con su libro a elección, “se le va consultado a los niños sobre el libro, si le gusta, si lo entiende, etc. todo esto de una manera poco invasora”, explica Saturnino Borrego.

Con el paso del tiempo, los mismos alumnos fueron recomendado libros con una rúbrica modelada. A fines del primer semestre se incorporaron como parte del plan, mesas redondas que intentan responder interrogantes que surgen de la lectura. “Una pregunta que se repetía era: de los libros que has leído este año, ¿en cuál de ellos parece que el protagonista se guía por estereotipos?”, comenta Borrego.

“Cada semana, nos comprometimos a completar una encuesta, vía formulario de Google, sobre el tiempo dedicado a la lectura efectiva y si habíamos dedicado tiempo a hablar de libros (ya sea recomendación o en la mesa redonda)”, añade el profesor.

Al momento de revisar los resultados, el Plan Fomento Lector logró que los niños entre 7º y 8º leyeran en promedio 9 libros y los de primero medio 12 libros durante el año.

“Sabemos que el leer y entender es definitivamente una habilidad transversal a cualquier asignatura, y por ellos, desde la Fundación Irarrázaval apoyamos las iniciativas que incentivan la lectura, y el gusto por ella”, concluye Aníbal Vial, Gerente General de la Fundación Irarrázaval.