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Con más de 750 cuentos escritos y enviados por estudiantes de I a IV medio, el Colegio Piamarta de Estación Central, obtuvo la mayor participación logrando el primer lugar a nivel nacional, un reconocimiento celebrado por todo el establecimiento.

“El Pia en 100 palabras”, así se tituló el concurso de cuentos que el Centro de Estudiantes del Colegio Piamarta, ubicado en Estación Central, realizó el año 2016. Con este concurso interno, comenzó la motivación y la idea de escribir cuentos cortos y participar, pero llegó la pandemia, y la idea quedó guardada, pero no olvidada, como cuenta Paula González, Coordinadora de Bibliotecas CRA del establecimiento. 
 
El año 2023, deciden retomar el tema, y participar oficialmente como colegio en el concurso Santiago en 100 palabras presentado por Minera Escondida y la Fundación Plagio. “Nuestras y nuestros estudiantes tienen esa cultura de escribir con caracteres acotados y, además, son muchos los que escriben de forma autónoma permanentemente”, comenta Paula.  
 
En concreto, se involucró a toda la enseñanza media en el concurso como cuenta Silvana Palma, Coordinadora del Departamento de Lengua y Literatura del Colegio. Desarrollaron el concurso durante las clases de Lenguaje de manera voluntaria, sin embargo, quienes se sumaban tenían la posibilidad de mejorar alguna calificación, pero la mayoría se sumó por el premio que implicaba el concurso, donde optan al premio Talento Joven”.  
 
Los jóvenes se entusiasmaron, y el año 2023, sin esperarlo, reciben una mención especial por la alta participación. Con este premio, el año 2024, fue aun mayor la motivación y presentaron alrededor de 800 cuentos. “¡Batimos el récord! primera vez que se mandaron tantos cuentos de un establecimiento al concurso”, cuenta Silvana.  
 
En esta oportunidad, con mayor ilusión y a pocos días de la entrega de los resultados, recibieron el llamado de la organización invitando a presentarse a la premiación. Lograron obtener los permisos, y una delegación de estudiantes y profesores asistió a la ceremonia donde el Colegio Piamarta recibió el primer lugar entre los establecimientos que enviaron más cuentos: “Fue super emocionante. Hay una historia que surge por una inquietud de los estudiantes, que quedó en el tiempo, y que es muy bonita y que dio un fruto, que, si bien es la cantidad de cuentos, nos hace decir: estamos aquí, somos del Piamarta y escribimos cuentos y ganamos”, señala Silvia Palma y añade: “Fue un logro, porque cada chiquillo le puso mucho corazón a lo que escribió”.  
 
Alfredo Coo y Daniela Cavans fueron dos de los estudiantes que participaron con sus cuentos. Alfredo cuenta que, en un principio, se motivó a escribir por el premio, pero luego comenzó a desahogarse: “con el desarrollo de los cuentos que estábamos haciendo me sentí bien poder desahogarme un poco, y poder lograr algo a través de la escritura”, afirma y agrega: “Yo era malo leyendo, y durante el proceso sentí que era capaz, me sentí muy bien y el premio pasó a segundo plano”.  
 
Para Daniela fue una actividad creativa: “A pesar de que no soy buena escribiendo historias, me interesó mucho, porque podía expresarme a través de la escritura, y tener un cuento mío y luego ganar el premio, fue un reconocimiento de que todos podemos escribir algo”, comenta.  
 
La profesora del CRA, Paula González, cuenta que se realizó un trabajo de apoyo con los estudiantes, de corrección de textos y retroalimentación. “Todo ese trabajo que uno hace, esta vez tuvo un reconocimiento que no es común y fue muy gratificante”.  
 
Con el premio podrán comprar libros para la biblioteca del colegio y además tienen la posibilidad de que los visite un escritor. “¡El desafío para el próximo año son los 1000! Y continuar con el desarrollo creativo de la escritura en los chiquillos, porque es una herramienta fundamental para el desarrollo emocional, del lenguaje y una forma de expresión”, concluye Paula.